La fasciopatía plantar, o comúnmente llamada fascitis, es una lesión que afecta a la fascia plantar, una banda semielástica que transcurre desde el calcáneo (hueso del talón) hasta la base de los dedos y que puede dejarnos alejados de las pistas durante un tiempo. En la gran mayoría de casos esta lesión se localiza en la inserción de la fascia, es decir, en el punto de unión de la fascia al calcáneo. Suele presentar un dolor más o menos intenso especialmente durante los primeros pasos tras periodos de reposo.
Pese a que comúnmente se ha encasillado como una lesión inflamatoria (de ahí el término fascitis al cual nos referiremos en este artículo), los estudios más recientes muestran que se trata de una lesión de carácter degenerativo, es decir, que se produce una destrucción del tejido, alteración de la orientación de las fibras y engrosamiento del tamaño de la fascia, por eso la terminología adecuada para definirla sería “fasciopatía” pese a que se acompañe de inflamación del tejido.
¿Qué es la fascia plantar y cuáles son sus funciones?
La fascia plantar es una banda semielástica, de aspecto y comportamiento similar al de un tendón.
La fascia plantar es un pilar fundamental en la biomecánica del pie y de nuestro cuerpo en general, no solo por su función de aportar sostén al arco del pie, si no por su gran labor en la absorción y liberación de energía elástica cuando realizamos cualquier actividad física, desde caminar hasta correr o saltar. De esta manera, la fascia juega un papel muy importante en el pádel, en dónde debido a las características de juego, la fascia tendrá la función de absorber la energía generada en todos los desplazamientos y acciones y liberarla de manera que nos aporte una mayor eficiencia, evitando por ejemplo un exceso de trabajo de los gemelos.
¿Cuáles son las causas de la fascitis plantar?
Cómo en la gran mayoría de lesiones, la causa suele ser multifactorial, es decir, que el origen de la lesión se debe a una suma de factores de riesgo que en un determinado momento producen la lesión.
La fascitis plantar, al igual que las tendinopatías, se categorizan como lesiones por sobreuso, es decir, lesiones que aparecen por una repetición elevada de una situación que está generando estrés o fatiga en esa estructura.
Los principales factores de riesgo de fasciopatía plantar son:
- Pisada pronadora
- Contractura del gemelo interno y/o sóleo
- Cambio de calzado
- Calzado inadecuado
- Índice de masa corporal elevado
- Debilidad de la musculatura del pie
- Intensidad y tiempo de entrenamiento
- Falta de preparación física
- Superficie o terreno de juego
¿Por qué la fascitis plantar es la segunda lesión más frecuente en el pádel?
Debido a la gran intensidad en los desplazamientos y gestos que se realizan en el pádel (desplazamientos laterales, aceleraciones, frenadas, saltos y aterrizajes) junto al aumento del apoyo en la parte delantera del pie durante casi todos estos gestos, la fascia se ve sometida a una continua solicitación mecánica, es decir, sufriendo un estrés muy elevado.
Además, se ha visto que en el Split step se aumenta la activación del gemelo interno y el sóleo lo que puede acabar generando fatiga en esta musculatura o sobrecargas de la misma. La sobrecarga de los gemelos o aumento de tensión de estos se traduce en un aumento de tensión de la fascia plantar, por lo que la solicitación de esta también se ve aumentada.
¿Cómo prevenir la aparición de fascitis plantar?
Prevenir una lesión al 100% es prácticamente imposible, pero si que podemos reducir el riesgo o las probabilidades de que aparezca. ¿De qué manera podemos intentar prevenirla?
En primer lugar, es de gran importancia conocer qué factores presentamos que puedan ocasionarnos una fascitis plantar, por eso es recomendable realizarse un estudio biomecánico de la pisada en un centro especializado para ello. El estudio biomecánico de la pisada nos ayudará a detectar y comprender cómo se comportan nuestros pies y cómo influyen en el funcionamiento de nuestro aparato locomotor.
Una vez detectados los posibles factores que puedan favorecer la aparición de una fascitis plantar, trataremos de ponerles solución con:
- Una correcta preparación física para solventar aquellas deficiencias de nuestras estructuras que puedan influir en la aparición de la lesión.
- El uso de plantillas a medida para modificar patrones de la pisada que puedan favorecer la aparición de fascitis durante nuestra práctica deportiva.
- Una correcta técnica en los desplazamientos y acciones que nos ayudará a ser más eficientes dentro de la pista.
- Calzado adecuado a nuestras características y al tipo de moqueta en el que juguemos.
- Estiramientos y relajación de los gemelos y sóleo con foam-roller tras nuestros partidos o entrenamientos.
- Masajear con una pelota nuestra planta del pie después de jugar.
- Acudir a un fisioterapeuta para tratar aquellos déficits de movilidad o sobrecargas que puedan influir en la aparición de la lesión.
¿Cuál es el tratamiento para la fascitis plantar?
En estadios iniciales, se recomienda:
- Fisioterapia. Es esencial para una correcta recuperación del tejido. Además, si la causa se encuentra en una contractura de los gemelos o sóleo, será fundamental reducir dicha contractura para reducir el dolor de la fascia y la tensión de la misma.
- Plantillas a medida. Son una buena estrategia para combinar con la fisioterapia, enfocadas a disminuir el estrés tensil que soporta la fascia durante nuestros partidos o entrenamientos que es la causa de la degeneración de la misma y la aparición de la lesión. Además, serán de gran importancia a nivel preventivo en un futuro.
- Trabajo sobre la musculatura intrínseca del pie. El pie cuenta con musculatura que posee la función de aportar estabilidad y absorber energía. Si existe una falta de su función o una debilidad de esta musculatura, serán otras estructuras como la fascia las que se encarguen de esta función de manera excesiva.
- Calzado. Si la causa puede estar asociada a un calzado incorrecto, será recomendable analizarlo y cambiarlo en caso de ser necesario.