En este artículo abordaremos otros tipos de lesiones musculares como son las contusiones, el síndrome doloroso de aparición tardía y la distensión o rotura muscular.
Antes de adentrarnos en ellas, habría que preguntarle al jugador sobre varias cuestiones. En primer lugar, debemos medir la carga de actividad física, es decir, cuántas horas de pádel dedica a la semana y qué intensidad le imprime a cada una de ellas.
No es lo mismo el entrenamiento físico que el entrenamiento táctico, ni tampoco exige el mismo esfuerzo jugar un solo partido que jugar un torneo durante días.
A continuación, debemos interrogar sobre el mecanismo de lesión, si fue durante un cambio de ritmo, sprint o arrancada, durante un cambio de dirección, durante un estiramiento o fue un choque fortuito con una contusión.
Es importante conocer cuándo se produjo la lesión, si fue durante un entrenamiento, calentamiento, partido aislado o competición.
Y finalmente nos interesaremos por las sensaciones del jugador, si los síntomas han aparecido de inmediato o son diferidos, si mejoran o no con el paso de los días, si el dolor se alivia o empeora con el ejercicio, en cuanto a intensidad y duración del mismo.
Contusiones Musculares
Son lesiones muy frecuentes en el pádel, diría casi habituales, bien tras un choque con la misma pala en un movimiento brusco, contra el cristal e incluso con algún compañero despistado. Pueden manifestarse como un gran edema o hematoma importante, el dolor no suele trascender más allá de un día.
Síndrome doloroso muscular de aparición tardía (DOMS)
Dolor muscular importante, coloquialmente llamadas “agujetas”, que suele aparecer a las 24-36 horas posteriores a un esfuerzo muy intenso, como puede ser un torneo o tras periodos de inactividad, por ejemplo, y desaparece en unos 5 días aproximadamente.
Hay varias teorías que intentan explicarlo, la más aceptada sería una tensión mecánica mantenida con microrroturas, aunque en el pasado se intentó explicar por la falta de oxígeno y acumulación de cristales de ácido láctico, una hipótesis que quedó desmentida hace años.
Distensión o Rotura Muscular
La de mayor gravedad en este grupo de lesiones. Se clasifican en 3 grados:
- Grado 1 – Leve: Distensión muscular o elongación muscular, lesión microscópica que genera una mínima hemorragia y rápida recuperación.
- Grado 2 – Moderada: Rotura Fibrilar, rotura parcial con hemorragia significativa y repercusión funcional considerable.
- Grado 3 – Severa: Rotura Muscular, rotura completa con hemorragia considerable visible, tumefacción y posible discontinuidad a la palpación. Si se produce en la unión miotendinosa puede provocar una desinserción del músculo (avulsión) siendo de mayor gravedad.
En todas estas lesiones musculares, la exploración clínica suele arrojar mucha información del tipo de lesión que nos encontramos; aunque la certeza y alcance de la lesión nos la dan las pruebas de imagen como la ecografía o la resonancia magnética.
Como #padelconsejo, cuando sospeches una lesión muscular, finaliza el ejercicio de inmediato, colócate frío local (crioterapia) y visita a tu médico y/o fisioterapeuta para iniciar el tratamiento y un plan de recuperación adecuado. Cuida tu alimentación para mantenerte en un peso adecuado y consume más de 2 litros de agua diarios, esto te ayudarán a volver mejor a las pistas.
1 comentario
Como jugador de pádel, personalmente he sufrido algunas de estas lesiones y puedo decir que son muy incómodas y pueden afectar seriamente a nuestra capacidad de jugar. Yendo a mi fisioterapeuta me facilitó consejos para prevenir y tratar estas lesiones, como el estiramiento adecuado antes y después de cada juego, la hidratación y la técnica correcta al golpear la pelota